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 Navidad
Redacción (NJ) (Dec 04, 2009) Hace 13 años |
 Desde hace unos años parece que quieren adelantarse las fiestas navideñas y desde primeros de Diciembre aparecen por nuestras calles muchos de los “síntomas” de la próxima Navidad. Luces de colores, escaparates adornados con bolas y espumillón; Papá Noel, rojo y blanco; nieve, renos, nacimientos y belenes villancicos y músicas navideña, papeles de colores, lazos grandes y pequeños y árboles saciados de luz peblan las calles, tiendas, establecimientos y bares La televisión anuncia juguetes, perfumes, joyas, coches, vestidos, corbatas, bufandas…. Juguetes y más perfumes…. ¡Ya llega la Navidad!
Que bueno puede ser este año en el que poco a poco, se ve como aumenta el consumo y crece la economía y se activa el empleo…., aunque tan despacio….
Llega la nieve, se abren las estaciones de esquí, se llenan los hoteles y casas en pueblos y ciudades.
Pronto las navidades y en ellas los viajes y el descanso.
Llegan los regalos, los juguetes para pequeños y grandes, fiestas, celebraciones, lotería, cava, bailes y risas, músicas y cantos hasta altas horas de la madrugada.
Amigos, familia, rencuentro, hogar, sonrisas y lágrimas y más cosas que juntas, a veces ocultan en ves de avivarlo el tiempo dorado de amor y esperanza que es la Navidad
Por ello no es infrecuente escuchar de amigos, vecinos, familiares y extraños que les daño, que no les gusta nada, que no es un buen tiempo…, para ellos, el de Navidad.
Y es que, cuando falta el encuentro amoroso con un Dios hecho niño que quiere en nosotros hacer su morada, las luces nos ciegan, la música aturde, los regalos atrapan el corazón que quiere, libre de cargas, descubrir el sentido, encontrar el amor que tanto le falta.
Los hombre quieren, en especial, los jóvenes, encontrar sentido a la fiesta que intuyen muy honda y que a sus ojos aparece – no saben porqué- algo falsa.
No hace falta decir, sin embajes, cúal es la causa de haber perdido el sentido de esta fiesta Santa.
Nos hace falta Fe en esta etapa; al final de un milenio que acaba enfermo e irritado, sin ninguna Esperanza. Lleno de guerras con poco trabajo,muchos escándalos de juicios y trampas.
Quizás, si al fin reconocemos que algo nos falta al buscar- encontremos, en el silencio y la calma la Luz que ilumine y oriente los anhelos del alma.
¡ FELIZ NAVIDAD! Proclamamos -con respeto- a todos, especialmente a aquellos que no alcanzan a ver el sentido de estas fechas, en todo caso, Santas.
¡Ojalá! Que este año encontremos todos en El la Esperanza, llenos de júbilo celebremos juntos con cantos y danzas, regalos y fiestas la Navidad que llega, a calles y plazas. |
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