DEPORTES  •  20-12-2004

Un Zaragoza Tocado
Valero Martínez y Jorge Franco (NJ)

El Real Zaragoza vuelve a dejar escapar los tres puntos de su feudo, en un partido en el que el Athletic Bilbao se mostró en todo momento superior.

Los protagonistas saltan al césped sosteniendo una pancarta con el lema "Metele un gol a la vida", campaña de la Dirección General de Tráfico, guardándose un minuto de silencio por las víctimas de los accidentes. El speaker de la Romareda hizo mención a la concesión de la Expo 2008 a la capital aragonesa con la consiguiente ovación del público.

La primera ocasión llega por parte del conjunto vasco, es Yeste el que saca un disparo cerrado con la zurda que se estrella en el larguero, el Zaragoza llegaba pero sin peligro. En un salto dentro del área zaragocista, Fernández Borbalan señala un penalti más que dudoso sobre Yeste, la afición que ya había protestado una posible pena máxima sobre David Villa se terminó de encender. Iraola es el elegido para lanzar y Luis García detiene evitando que los leones se adelanten en el marcador.

A los pocos minutos de la reanudación Santi Ezquerro solo en el primer palo aprovecha un envío de Yeste para adelantar a los bilbaínos, de nuevo un gol por alto que evidencia las carencias del Zaragoza en este tipo de jugadas. Con el gol el Zaragoza deja de funcionar lo poco que estaba funcionando y es el Bilbao el que tiene dos ocasiones clarísimas para sentenciar el encuentro, Casas lanza por encima del larguero y Etxeberria cruza en exceso. Víctor Muñoz intenta cambiar el curso del partido y da entrada a Cani y Javi Moreno por Galletti y Oscar. Con los cambios el Zaragoza se estira, pero es de nuevo el equipo vasco el que da más fuerte y en un contraataque de nuevo Ezquerro logra marcar el segundo y sentenciar el encuentro.

Este gol crispa a la afición que se enfada con el equipo y una parte de ella realiza cánticos en contra de los jugadores a causa del conflicto de las primas. Se espera que la mala racha acabe pero el siguiente desplazamiento a Riazor no invita a ser excesivamente optimistas.