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TELEVISIÓN  •  23-2-2004

En Defensa de la Verdad
Rebeca Muñoz (NJ)

Cinco redactores, un cámara y una montadora fueron los elegidos para formar parte del Comité antimanipulación de la información, que los trabajadores de TVE decidieron crear ante los hechos que la cadena está llevando a cabo en sus informativos. ¿Y qué pensará Letizia?

Unas elecciones que la empresa pública no prohibió pero todavía no reconoce. Unos votos 506, de las 1200 personas vinculadas al censo de trabajadores de la cadena. 506 votos de los cuales, tres fueron nulos y cinco en blanco. De este modo, cinco redactores, un cámara y una montadora, formarán parte del Consejo de Informativos de Televisión Española. Un órgano que nace frente a la creciente manipulación de la verdad que se está llevando a cabo.

Veintidós personas fueron candidatos en estas elecciones. Desde 1982, los trabajadores habían intentado cuatro veces la creación de un comité de este tipo, sin alcanzar ningún éxito. Tras la constitución lo que esperan es crear un Estatuto del Informador Audiovisual, por el cual se pueda velar por la independencia profesional y preservar la imparcialidad, la objetividad y el pluralismo de la información.
Alfredo Urdaci
Los trabajadores vieron la necesidad de crear este órgano, ante la creciente manipulación de fenómenos como la huelga general del 20 de Junio de 2002, la crisis del Prestige y la Guerra de Irak. No sólo ellos, el Consejo de Europa ha criticado también la falta de objetividad e independencia de los Informativos de la televisión pública española, uniéndolos claramente a un partido. Pero, aún con todo y pese a todo, Urdaci sigue siendo Jefe de Informativos de la cadena, aún cuando un tribunal le ha penado por manipular la información.

Los dirigentes de TVE han salido al paso, declarando "sólo 506 trabajadores han participado en las polémicas elecciones...". Si de 1200 trabajadores, casi la mitad cree que se está manipulando la información, toda la profesión periodística y todos los ciudadanos deberíamos meditar sobre las informaciones que damos y recibimos. "Si ustedes aún son inteligentes, liberen su cabeza de según qué informaciones, nunca sabemos quién dice la verdad". El manifiesto de los trabajadores es el siguiente:

Catálogo de malas prácticas habituales en los servicios informativos de TVE:

Los servicios informativos de TVE adolecen de una serie de vicios o malas prácticas que queremos denunciar y sistematizar. (Nuestra intención es contribuir a generar un movimiento profesional de rechazo a estos comportamientos):

• Inserción en los telediarios de noticias que no tienen contenido informativo, sino intención puramente propagandística de la actividad del Gobierno.

• Inclusión en los telediarios de notas y reportajes que nada tienen que ver con las noticias del día, ni con la actualidad más evidente, y que ocupan el tiempo de noticias que no se dan, bajo el pretexto de que ya no caben.

• Tratamiento parcial de aquellas noticias que presentan resultados de gestión del Gobierno, seleccionando los elementos positivos e ignorando o minorando los negativos.

• Interpretación en clave de mérito político de resultados o acciones técnicas o imputables total o parcialmente a los agentes sociales o económicos.

• Evitación de los aspectos que pongan en evidencia fallos, falta de previsión o mal funcionamiento de la actuación gubernamental en asuntos imprevistos como accidentes, catástrofes, etc.

• Ocultación de los asuntos que susciten polémica o crítica a la acción del Gobierno en distintos ámbitos políticos, sociales, económicos o culturales, aunque éstos ocupen lugares destacados e insistentes en otros medios de comunicación.

• Ordenación de las noticias no por su importancia sino de manera que beneficie siempre al Gobierno o al PP, o que perjudiquen a la oposición.

• Colocación de ciertas imágenes, a veces sin relación directa con lo narrado, sobre textos que provocan correlaciones falsas y perjudiciales para la oposición.

• Editorialización en la presentación de muchas noticias, siempre opinando en la misma dirección que el Gobierno.

• Ausencia de acontecimientos que se refieren a problemas o disputas, disensiones o conflictos de cualquier nivel y gran en el Partido Popular, aunque se manifiesten ya de forma pública y abierta.

• Insistencia, por el contrario, en los acontecimientos de la naturaleza descrita en el párrafo anterior, cuando éstos se refieren a partidos de la oposición.

• Aparición frecuente de políticos de la oposición cuando éstos manifiestan opiniones discrepantes o contrarias a la línea mantenida por la dirección de su partido.

• Silenciamiento absoluto de los políticos desidentes o discordantes en el Partido Popular.

• Presentación confusa de las propuestas de la oposición, generalmente insinuando contradicciones, falta de consenso interno, debilidades argumentales, etc.

• Contestación sistemática de algún portavoz gubernamental o popular a las críticas, propuestas o comentarios de los representantes de la oposición, casi siempre buscadas o forzadas.

• Ausencia de réplica o defensa de los miembros de la oposición, cuando dirigentes del Gobierno o del PP formulan criticas contra ellos.

• Subrayado de todo lo que menoscaba la actividad de los gobiernos de orientación política distinta a la del Gobierno central, con especial virulencia en el caso de gobiernos nacionalistas, y especialmente, el vasco.

• Destacar todo aquello que pueda profundizar la división y el enfrentamiento civil en aquellos territorios (Euskadi) en los que el PP está en franca minoría.

• Marginación, en política internacional, de todo aquello que contravenga la orientación unilateralista del la Administración Bush.