Noticias Jóvenes
 Portada
 Prensa
 Radio
 Televisión
 Internet
 Tecnologías
 Reportajes
 Deportes
 Música
 Cine
 Teatro
 ONGs
 Ecología
 Educación
 Libros
 Gente
 Sociedad
 Perfiles
 Encuestas
 ICC   Ánade
 Enlaces
 Hemeroteca
 Quiénes somos
 Colabora con NJ
 Contacto
La visualización completa del índice requiere JavaScript. En todo caso, el índice completo es accesible desde la Portada

MÚSICA  •  1-6-2003

Festimad 2003: Un Fin de Semana en la Locura
Héctor Mendal Escario (NJ)

"¡Por favor, no me saquéis de aquí, quiero quedarme, es mi ídolo!" gritaba una enfervorecida fan que estuvo a punto de desmayarse entre el público y tuvo que ser conducida por los servicios médicos a la zona de prensa; la chica, al sentirse tan cercana a su ídolo, luchó con todas sus fuerzas por agarrarse a los barrotes metálicos del escenario, para que los servicios de seguridad no la sacasen de allí. No, su ídolo no era David Bisbal o Brad Pitt, era Marilyn Manson. Y es que este Festimad 2003 se ha caracterizado por un factor inigualable: el fenómeno fan rendido al rock más duro, a los sonidos estridentes de Marilyn Manson, Deftones, Audioslave o Molotov. "Además de estar buenísimo, menudo vozarrón tiene", gritó más de una cuando se estropeó uno de los altavoces del escenario principal durante la actuación de Audioslave y, aún así, se podía escuchar con nitidez desde las primeras filas la voz del cantante, Chris Cornell.

Campo de batalla El Soto, Móstoles

Horas antes del concierto de Marilyn MansonPor supuesto, los servicios sanitarios también tuvieron que hacer horas extras durante las actuaciones de HIM, Deftones -tres desmayos sólo en la primera canción- o Molotov -decenas de "pinches" mejicanos en el exilio acudieron al retorno de la banda a España tras cuatro años-. Y es que el calor, la fiesta, la falta de sueño y, sobre todo, la gran aglomeración de gente que invadió el Parque El Soto de Móstoles, pusieron en aprietos a más de una de las personas allí presentes. Decididamente, el panorama que se podía observar tras casi todos los conciertos, seguramente, le recordaría a más de uno a un campo de batalla de los que podemos ver en las películas: vasos y botellas rotas, gente tirada por los suelos, suciedad, barro y, al fondo, como si de hospitales de campo se tratara, las miles de tiendas de campaña que dieron cobijo a las más de veinte mil personas que asistieron al Festimad. Eso sí, el público asistente dio un gran ejemplo de civismo, sin provocar altercados y respetando continuamente el mobiliario urbano del Parque El Soto, cuyas plantas de mayor valor fueron precintadas antes de la llegada de los campistas.

Un gran negocio

Mientras uno se paseaba por las instalaciones del parque de Móstoles, se daba cuenta del negocio que se plantea alrededor de este tipo de Festivales. Centenares de puestos de venta directa donde los fans podían encontrar camisetas, discos, pósters y todo el merchandising de los grupos asistentes, a precios a veces desorbitados para este tipo de artilugios. Si a ello le sumamos las decenas de puestos de comida y bebida rápida con unos precios, para la mayoría de lo asistentes, abusivos -cinco euros, por ejemplo, por una hamburguesa-, la lejanía del centro comercial más cercano y el precio de las entradas -72 euros abono anticipada u 80 euros abono en taquilla, y 42 euros un día anticipada ó 50 euros un día en taquilla-, uno se da cuenta del gran negocio que mueve el Festimad. Y este negocio se nota, no solo en el público asistente, sino también en la repercusión mediática del evento.

El fenómeno fan aplicado a las estrellas del rockMás de un centenar de periodistas acreditados para el Festimad, trabajando en unas condiciones, cuanto menos, precarias. Algunos tuvimos que "tomar prestadas" las mesas de una de las terrazas anexas a la exigua carpa de prensa para poder seguir, por ejemplo, la multitudinaria rueda de prensa de Marilyn Manson.

En definitiva, un fin de semana cargado de emociones, cansancio, sudor, lágrimas, desmayos y, sobretodo, descarga de adrenalina. Marilyn Manson, Deftones, HIM, Disturbed, Hamlet, Audioslave, Molotov,... y así hasta completar un total de 38 grupos, mas diez DJ's, concurso de break dance, graffitti y de performance. Un cartel difícil de igualar. Veremos si, al año que viene, la organización lo consigue.